La próxima primavera, Madrid contará con un nuevo jardín de tulipanes blancos y naranjas gracias a la princesa Amalia de Orange, hija de los reyes Guillermo Alejandro y Máxima de los Países Bajos. La joven heredera al trono neerlandés, de 20 años, ha donado estas flores como muestra de gratitud por la hospitalidad recibida en la capital española durante el tiempo en que cursó sus estudios en la Universidad de Ámsterdam desde Madrid, tras mudarse a la ciudad debido a las amenazas del crimen organizado.
La plantación de los tulipanes tuvo lugar el pasado lunes 11 de noviembre, en una ceremonia encabezada por el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, y el embajador de los Países Bajos en España, Roel Nieuwenkamp. El jardín, situado en la plaza de Oriente junto al Teatro Real, fue inaugurado con un mensaje de agradecimiento de la princesa de Orange, quien no pudo asistir al acto. “Por circunstancias especiales, tuve el privilegio de vivir un año en vuestra maravillosa ciudad de Madrid. La calidez con la que fui acogida me hizo sentir como en casa, y por ello quiero expresar mi más sincero agradecimiento a la ciudad, a sus habitantes y a todos los que lo hicieron posible”, expresó la heredera a través de las palabras del alcalde.