Opinión de TENS Holanda – Alessio

Yo vivía en Génova, y soy una persona a la que le encanta vivir en diferentes puntos del mundo. He estado en Moscú, Italia y Venezuela. Justo de aquí soy yo, aunque tengo la nacionalidad italiana. Quise poner rumbo a otro lugar de Europa y disfrutar de una nueva experiencia. Escribí a varias agencias y, gracias a Dios esta fue la que antes contestó. Tardó simplemente 4 días en concretarse todo y más adelante poner rumbo a Waalwijk.

TENS Holanda me fue recomendada. Un amigo que había trabajado con ellos años atrás y me pasó El contacto para que probase yo también. Como en Italia no cobraba ni cercano a lo que iba a cobrar en Holanda, no me costó mucho moverme y cambiar. Me contactó Alonso y dentro de lo que cabe, con toda la entrevista y datos, todo fue muy pero que muy claro. Lo único, y de lo que me fui dando cuenta cuando llegué aquí fue que si tienes pensado vivir esta experiencia, tienes que ser muy consciente de lo gastos que tienes. En la entrevista te los dejan muy claros y uno tiene que ser responsable y tener un colchón para empezar.

Al principio es duro. Tienes que pagar varias cosas, y eso fue lo que me pasó a mí, pero el día que cobras y ves lo que tienes en la cuenta… El panorama cambia radicalmente. En mi caso, que mando dinero a mi familia, es un poco difícil que te queden más de 170 euros, pero como digo yo: “si fuese joven y sin ninguna responsabilidad, estaría montado en el dólar”. El secreto está en las largas estancias. Es ahí donde logras retener y ahorrar gran parte del sueldo. Se nota en el bolsillo. Al iniciar siempre estarás revisando tu cuenta y posponiendo compras o planes, pero ya teniendo la experiencia, tendrás un montón de dinero acumulado. Como emergencia, se agradece tenerlo. También hay que pensar que ese dinero se convertirá en la recuperación del dinero que gastaste al principio de tu experiencia. Siempre hay que ponerse en lo mejor con lo económico y no venirse abajo.

Lo que más he notado en el sentido de gasto, ha sido la primera compra donde adquieres los básicos como la sal, el aceite, las especias… y el tabaco. Dios mío, aquí me gasto un riñón en el tabaco. Yo que siempre he sido de cigarrillo industrial, mis compañeros españoles me recomendaron que me pasara al tabaco de liar. Y bueno… Aquí estoy. Aprendiendo a como liarme los cigarros. Es que teniendo en cuenta que un paquete de industrial viene con 20 cigarrillos y el de liar te da para unos 50, pues se agradece bastante. Todo sea por ahorrar que es lo que nos preocupa. En mi alojamiento comparto la habitación con un compañero que se está volviendo casi familia. Es un personaje. Lo conoce todo Waalwijk y los pueblos que lo rodean. Sales a tomar algo con él y parece un político. Le va dando la mano y saludando a todo el mundo. Es un gustazo poder compartir mi experiencia con él, porque al tener tal veteranía (5 años), te enseña como va todo y hay que agradecer toda ayuda que tengas.

En el trabajo también tengo muy buena relación con mis compañeros. Hay un montón de gente de otros lados. Es por ellos que este nuevo capítulo en mi vida vale la pena. Son gente que se acercan a ti, te preguntan, se preocupan, te invitan… Al fin y al cabo, estamos en la misma situación y actuamos como hermanos. Algo básico para estas empresas es que hables idiomas, no es una obligación, ni algo que te ponga por encima de otro, pero te acerca a la gente que hable esos idiomas. Mi estancia en Moscú aprendiendo ruso me ha hecho acercarme a los ucranianos. No sabía que fuese tan parecido, pero el agradecimiento que puedes ver a través de sus ojos…. Es que no tiene precio. Y es que es lo mismo con otras nacionalidades. La gratitud y cariño te hace sentirte el mejor y estar acompañado de los mejores.

Solo me queda recomendar esta experiencia, porque es lo único que puedo hacer con este artículo. Es una experiencia única, rodeado de gente especial y de conocimiento. Has venido a trabajar, ganas dinero, aprendes y te llevas a gente que te acompañará por muchos años. Entonces, atrévete y ven. No te vas a arrepentir y serás una persona completa cuando quieras finalizar. Te lo digo yo que lo estoy haciendo.